Todos sabemos
que en la última década el sobrepeso se ha convertido en uno de los principales
temas de “preocupación” en el área de la salud y de la estética. Siendo un factor pernicioso
que eleva las probabilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares y metabólicas,
así como un sinfín de males asociados, la obesidad empieza a ser tratada con
conciencia y se comienzan a proponer formas de abordarla y de controlarla. La
acupuntura es una de las propuestas efectivas y válidas para lograrlo, pero
debemos recordar que la obesidad posee muchas aristas que debemos tener en
cuenta si deseamos perder peso saludablemente y de forma definitiva.
Desesperados
por su condición, las personas que sufren de obesidad acuden a multitud de
especialistas en búsqueda de soluciones milagrosas que le ayuden a desaparecer
esos “kilitos de más” que llevan consigo. Durante ese viaje, dichas personas se
ven expuestas a multitud de opciones que en su mayoría no son las más
saludables, y olvidan que la obesidad no es un problema estrictamente estético
sino que es esencialmente un asunto de salud. Dietas mal concebidas,
inyecciones de alcachofa, merengadas, infusiones de guaraná e incluso hasta
operaciones, son perseguidas por aquellos que sufren de sobrepeso, y si muchas
veces logran bajar el mismo, no trascurre mucho tiempo antes de que vuelvan a
ganarlo, muchas veces incluyendo unos extra.
Y es que hemos
fallado en entender que el 95% de los problemas de salud son producto de los
hábitos y del estilo de vida que llevamos. Muy pocos obesos tienen realmente
una causa metabólica de origen genético que justifique los niveles de sobrepeso
que poseen; así que el primer mito se va rompiendo allí: muchas veces las
personas no hacen nada por estar saludables porque piensan que están “diseñadas
genéticamente” para ser gordas. Esto no es correcto. Lo mismo ocurre con la
idea de que “todos en mi familia son gordos, así que por eso yo también lo soy”;
lo cierto es, que más allá de tener una “genética de gordito”, es que se tienen
unos mismos hábitos alimentarios, que terminan desencadenando la consecuencia
del sobrepeso y sus asociados.
Muchas veces formamos nuestros hábitos desde niños.
El otro factor
importante es que las personas que sufren de sobrepeso, generalmente en algún
momento de sus vidas, practicaron dietas que tal vez los ayudaron
momentáneamente, pero que posteriormente hicieron que ganaran aún más peso del
que perdieron. Esto se debe a una razón muy sencilla: las dietas han sido
concebidas como algo provisional para alcanzar una disminución de peso y
no como una aproximación nutricional permanente que lleve hacia una vida
saludable. Lo que quiero decir, es que lo que verdaderamente hará que Ud pierda peso de forma definitiva, es un régimen nutricional
que usted pueda practicar el resto de su vida; de otra forma, siempre estará perdiendo y
ganando peso. La razón de esto es lógica
y sencilla: si Ud. está intentando perder peso comiendo solo piña o tomando una
merengada durante el desayuno, el almuerzo y la cena, lo logrará; pero al
momento en que vuelva a sus hábitos nutricionales anteriores volverá a subir de
peso. Es una simple cuestión de causalidad.
Y en este
punto entra otro problema: somos muy impacientes respecto a la obesidad.
Deseamos perder 25 kgs en un mes, y si en la primera semana sólo perdemos 2kgs,
entonces nos sentimos desanimados y derrotados. Esto nos hace volver a comer
como antes, o incluso peor. La verdad es que hemos trabajado en esos kilitos de
más con mucha perseverancia; y si nos tomó unos 10 años ganarlos, puede que tome
más que unos pocos meses para quitarlos de encima. Recuerde, cambiar los
hábitos requiere tiempo, y debemos desmontar años de una práctica para
sustituirla por otra que nos otorgue los resultados que deseamos.
Lo que comemos suele ser nuestro principal enemígo.
Habiendo
aclarado los puntos anteriores, podemos retomar el tema de nuestro título:
¿Realmente la acupuntura funciona para perder peso? Pues bien, la acupuntura es
efectiva para disminuir la ansiedad y para acelerar el metabolismo, es lo que
se ha demostrado en multitud de investigaciones de acupuntura alrededor del
mundo; es decir, sí funciona para bajar de peso. Sin embargo, siempre
tendremos que actuar sobre los hábitos que tenemos al comer, puesto que estos
son la real causa de la obesidad; y así como uno puede decir que una escoba es
efectiva para barrer, también debemos entender que poco hará una escoba en un
lugar donde cada vez que pasa, alguien vuelve a echar basura en el piso, una y
otra vez. Nuevamente, es cuestión de lógica. Si una persona cambia sus hábitos
alimenticios, bajará de peso. Si una persona cambia sus hábitos alimenticios y
simultáneamente se hace acupuntura, bajará aún más rápido de peso.
Resumiendo, para bajar de peso
debemos:
1. Entender
que son nuestros hábitos lo que nos ha traído hasta donde estamos.
2. Cambiar
nuestros hábitos nutricionales por hábitos saludables, que se puedan practicar
el resto de nuestras vidas. Es decir, un régimen nutricional permanente.
3. Practicarse
acupuntura para acelerar la pérdida de peso, controlando la ansiedad y
mejorando los procesos orgánicos a través de la regulación del metabolismo y de
la energía involucrada en el mismo.
4. Tener
paciencia y entender que recuperar de manera definitiva nuestro “peso ideal”,
es un proyecto a mediano y largo plazo que realmente vale la pena.

Acupuntura para adelgazar.